Thursday, May 3, 2007

sobre la estrella de la muerte

Fue hace mucho mucho tiempo, sí. En una galaxia muy muy lejana. Eso también es verdad. Pero las similitudes de lo que les quiero contar con la saga de La Guerra de Las Galaxias acaba aquí. Lo prometo!

La verdad es que ante un principio como este no quiero terminar de hacerla y quedarme yo solo, pero necesito de ustedes un poquito más de atención antes de abandonar la lectura. Prometo que será interesante. Voy a intentar darles una versión reducida de un fenómeno crucial en el universo. No quiero enrollarme con detalles pero tampoco quiero que no lleguen a la esencia, porque es de eso de lo que va todo esto.

Esas partículas tan minusculas que nos forman (a nosotros y a todo lo que nos rodea: aire, tierra, agua, etc) y que llámamos átomos tienen diversos tamaños y pesos. Resulta que la única explicación para la existencia de átomos de carbono, oxígeno, sodio, calcio o las decenas que vienen detrás de ellos (y que son los que forman mis huesos, mis músculos, pero aún más: el aire que respiro) es la fusión estelar.

Seré breve en esto. Es en el centro de una estrella, donde la temperatura y la presión son inimaginables donde todo tiene lugar. Ahí y sólo ahí y mediante un proceso bastante complicado es posible la creación de todos los átomos que dan forma al universo.

Se me escapa si lo visualizan ya con certeza, pero a mis ojos es claro de entender: todo, absolutamente todo lo que vemos, todo lo que somos, de lo que estamos hechos; y repito una vez más TODO ha sido creado en el centro de una estrella a millones de grados y miles de millones de kilómetros de aquí. Esto no es una divagación mía, ni tan siquiera una teoría científica un poco alocada. Es un hecho. Espero que, hasta ahora, me sigan todos.

Yo no quería hablar del pasado. Quería darles cierta perspectiva. El futuro, nuestro futuro, no es incierto como muchos dicen. Tan pronto como yo muera (o mucho antes si somos más exactos) mis partes constituyentes empezarán a desprenderse e irán dando lugar a otras formas de vida junto con las de ustedes. Tal y como debe ser según las leyes de la biología.

Pero digo más: tan pronto como esta bola de roca reviente en cien mil pedazos (esten tranquilos, soy optimista respecto a eso: nos sigue quedando mucho tiempo) nuestras partes fundamentales, una vez más, formarán nuevas estrellas y darán luz a otros mundos. Incluso, tal y como firmemente creo, darán lugar a la vida otra vez.

No sé si ya vislumbran, como yo, la grandeza del argumento: la muerte no existe. El universo es un baile de átomos que ora son estrellas, ora son agua, u ora forman el corazón que tantos problema me causa. Así ha sido durante mucho tiempo y así será durante mucho más. Repito, no es una teoría. Es tan cierto como impactante.

Si uno deja atrás la idea de la inmortalidad clásica y entiende que se es un todo, no ya con los demás seres humanos; no incluso con La Tierra; sino con el Universo en su conjunto. Entonces, ante lo eterno que parece el tiempo a escalas cósmicas, hablar de la muerte es simplemente banal, insustancial. No tiene sentido.

No se confundan conmigo. No he entrado a formar parte de ninguna secta. Por supuesto que todos moriremos algún día y, pésenos mucho, no podemos cambiar eso. Es la forma de entender ese estado, la muerte, la que nos hace pasar algunos quebraderos de cabeza. Muy humildemente, es contra eso contra lo que lucho

Y señores, me falta un final. Pero ya les dije: no lo hay. Si acaso, y muy modestamente, acéptenme un consejo. Intenten entender la vida y la muerte como parte de una misma cosa. No algo que estaba aquí antes de nosotros llegar y que estará cuando nos vayamos. Si piensan así es que no han entendido nada! Siempre hemos estado aquí y siempre lo estaremos.

Es por todo lo anterior que pienso que nos volveremos a encontrar, alguna vez. Dentro de algún tiempo, tarde o temprano. Y entonces, como en un principio, seremos uno.

La muerte, para nosotros y por lo tanto, no puede existir. Vivamos sin miedo entonces.

3 comments:

Anonymous said...

Puff Jhoni, no se como decir esto, pero creo que ahora mismo estamos en el mismo nivel. No, no nivel, fase?,época?, estado? no lo se exactamente.El caso es que no hace mucho conoci a un chico muy muy especial, que me hablo de muchas cosas de las que tu hablas en este pequeño espacio. Lo que somos, donde vivimos, la sociedad , el sistema, etc, y en verdad a conseguido cambiar mi mirada, mis sensaciones, a mi misma, con respecto a todo esto. Es mas chungo, porque entonces miro a mi alrededor y muchas veces siento asco de todo, de los tonterias de las que se habla, etc. No se si me entiendes. Pero bueno necesitaba decirte esto, porque me ha sorprendido mucho cada vez que leo tu espacio encuentro una entrada nueva sobre algo en lo que he estado pensando no hace mucho.
Solo era eso, que me doy cuenta que no hay tan poca gente como pensaba en "el otro mundo".
UN beso grande

Anonymous said...

vale la de antes era yo, Carla,je,je

karmagh said...

Como tú dices, es mucho más complicado ser crítico. Las ovejitas últimamente ya ni se preocupan en saltar la cerca (¿será eso por lo que últimamente no duermo mucho?)

No soy tan optimista como tú. No creo que seamos muchos los que pensamos un poco de vez en cuando y, solamente, en los ratos libres.

De cualquier manera a mi también me alegra saber que no estamos solos.

Un abrazo fuerte,